En vísperas del día de brujas, un grupo de adolescentes decidieron pasar la noche reunidos en casa de una compañera. La idea era ver películas de terror, comer palomitas de maíz y contar historias perturbadoras.
A las 8:00pm ya todos se encontraban en el lugar. Pasaron 15 minutos cuando una tempestuosa lluvia se hizo con el exterior de la vivienda, llena de truenos, que pondrían la piel de gallina a cualquiera. No obstante, estando todos entretenidos con la televisión, nadie le dio mayor importancia a la tormenta.