Había un matrimonio joven que no encontraban donde vivir, pues se la pasaban de casa en casa de sus familiares y ya les era molesto tener que vivir así, pues era cada vez más complicado ya que tenían un hijo de dos años.
Cuando salieron un día se dieron cuenta que cerca de la casa de la mamá de la mujer, se estaba vendiendo un piso, ellos encantados decidieron verlo para ver si los convencía, cuando lo visitaron se dieron cuenta que era el lugar perfecto, el señor aún se asombró más al ver el precio pues estaba bastante barato, así que no dudaron en conseguirlo y cambiarse lo más pronto posible.
Los días pasaron y se empezaron a escuchar muchos ruidos, pero no les tomaron en cuenta pues pensaron que era normal por ser nueva la casa.